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martes, 8 de abril de 2025

MIENTRAS TODOS DORMÍAN, YO TE BUSCABA

 



Hay muy pocas cosas de mi mermada existencia que la engrandezcan tanto y me hagan sentir tan dichosa y acompañada como el amor de una persona. Una persona conectada a mi corazón, que lo llena de júbilo, a la que le importa si descansé bien anoche, si llegué temprano a casa, sin atropellos a los que Renfe nos tiene tan acostumbrados. Si me abrigo el cuello cuando salgo de casa. Si me alimento con proteínas vegetales de calidad, y no me excedo con los hidratos. Si ya tomé el calcio y el magnesio y el colágeno y ya escribí al levantarme, como hago todas las mañana, y si lo hago de manera regulada, como aconsejan los que saben. Si ya conseguí poner orden en mis archivos, para que un día este trabajo que llevo haciendo desde hace más de diez años, de sus frutos y ensamblen todos los textos en contenido y forma, para convertirlo en el libro que deseo tener en mis manos, y en las tuyas. Si me gustó I Just call to say i love you de Stevie Wonder, que me mandó antes de comer; a él le hizo llorar pensando en lo nuestro. Si empecé o no con buen pie la semana, si me está yendo bien el día, y si ya llamé a la compañía de seguros para que me enviasen un albañil, a pegar los azulejos despegados del baño. Si mi hija está mejor y se recupera bien de su accidente. Si disfruté con la clase de yoga, y si ya empaticé con la impresora nueva y pude colocar el cartucho de tóner. Si llegaré después de comer o más tarde, el próximo viernes: que me espera con impaciencia. Si me fueron bien los horarios de los autobuses que me mandó anoche antes de acostarse, si el restaurante que eligió me parece adecuado para ir a comer el próximo sábado. Si me va bien que me quiera, bueno esto último no me lo pregunta, me lo demuestra todos los días, y las tardes, y las noches de fiesta.


 A MI AMADO WINNI

Durante el último verano

no pisé este mundo.

       Una tarde de enero,

en la sobremesa de mi soledad

           se presentó la primavera.

 

Unas notas florales

elegantes y frescas

llegaban desde el jardín

a la casa.


En una estación olvidado

de mi abandono,

la vida se hacía nueva,

            con la misma alegría

delicada

que las flores brotan

en sus ramas

a finales de marzo.

 

Todo mi Ser se agitaba

con voluntad de hoja.

 

Un mirlo que pasaba

de pico dorado

y cuerpo azulado

me anunció tu Llegada,

                 y en mi jardín transformado

apareciste tú,

radiante

dulce y sedoso.

 

El reducido ser

en que me estaba convirtiendo

despertó de su letargo

con el fulgor de tu presencia,

y comenzó a brillar con luz propia  

            para dejar de ser una.

Intransferible a cualquiera.

 

               Mientras todos dormían

yo te buscaba, amor.

De tu voz velada

yo escuchaba el latido que la impulsaba.

Llevaba mi nombre.

 

Acudí a tu llamada,

venías para cuidarme

para hacer tuya mi mano

          para quedarte.

Para que yo te quisiera

con este amor maduro

apasionado y tierno

que nos distingue

de enamoramientos pasados.

 

Y aquí estoy ahora:

Insondable al duelo

y al dolor,

con toda la sabia, y la alegría

de mis mejores años,

que ahora

     son también tuyos.

Elena Larruy


viernes, 16 de diciembre de 2016

DE TU MANO



Escultura de Eva Oertli y Beat Huber




DE TU MANO


Quería hablar de ti,
de tu sonrisa congelada
los últimos inviernos,
de los abrazos que no me diste
en tu encendido silencio.

De cómo yo te quería:
como el caracol

que arrastra su caparazón
sin saber que lo protege
y lo lleva puesto.

De esa mano orgullosa

acompañando la mía
el día del estreno
¿te acuerdas?
vestia de blanco,
calcetines  cortos, calados 

y zapatos de charol negro,
era pascua de ramos.


De la verja del jardín
y su belleza
de la alegría del cerezo
y de la higuera de tu huerto
regalando su frescor,
y de ese otro frió de sombra vieja
que es rocío y escarcha,
enmudece, y congela
esperando el abrazo
que nunca llega.

Hablare del último invierno que pasé contigo,
de las lágrimas del niño que tenía frío
y esperaba mi calor

sin yo saberlo.

Elena Larruy


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