Artista Isabel Miramontes |
Cuando recogemos una pelota que acabamos de lanzar al aire, ese cálculo físico-geométrico el inconsciente ya lo tiene resuelto y su respuesta es automática de manera que no necesita pararse a hacer mediciones ni reflexiones. Esto demuestra que no es necesario desarrollar un razonamiento previo para obtener respuestas inteligentes y precisas. Así es como funcionan las mentes intuitivas: con instinto.
Otra cosa diferente es la confianza y los hábitos de comportamiento de la mente. Es un error querer entender la intuición desde la lógica de un pensamiento estructurado, sin margen de confianza. Las mentes excesivamente viciadas de información y de datos que no atienden al sentimiento intuitivo son inteligencias a medias, que no gozan de la excelencia.
La intuición es la respuesta a un complejo proceso experiencial que actúa alumbrando en un salto cuántico: inteligencia en acción inmediata, por lo que se puede afirmar que la intuición es talento.
Pero cuando tenemos dudas sobre el presentimiento, y dialogamos con la razón ¿será cierto? la respuesta -lógica, coherente y razonada- sí que puede fallarnos y no ser la cierta, ¿y por qué? por interferencias y conveniencias del intelecto. La intuición no se equivoca:sabe y lo sabe de antemano.
Y por experiencia propia sé que en cualquier decisión, primero se atiende el impulso del corazón, después se pregunta a la mente y una vez hechas las reflexiones oportunas determinaremos que la intuición nunca miente.
Despertemos pues la intuición. No siempre es fácil, a menudo sentimos respuestas que nos negamos a aceptar por no ser las que esperamos oír. Escuchar lo que nos dice el corazón y la intuición requiere coraje decía Esteve Jobs.
Os animo a confiar en este valioso conocimiento que es la intuición, os aportará seguridad, inmediatez, certeza y oportunidad.
Personalmente lo sé por experiencia y por tenerlo bien contrastado con otras voces que merecen mi credibilidad. Aquí os dejo una máxima de una de ellas.
ELENA LARRUY
La mente intuitiva es un regalo sagrado y la mente racional es un fiel sirviente. Hemos creado una sociedad que rinde honores al sirviente y ha olvidado el regalo.
Albert Eitein
"CONFÍA EN LO QUE SIENTES MÁS QUE EN LO QUE PIENSAS"